1917: una crisis para aprender en 2020

Para entender qué ocurre en estos tiempos de incertidumbre y saber qué opciones hay, nada mejor que echar la vista atrás y aprender de la Historia. Eso es lo que ha pretendido Emilio Sáenz-Francés en un reciente artículo para la revista Cambio 16. En él, el historiador y director del Departamento de Relaciones Internacionales de la Facultad de ciencias Humanas y Sociales, habla de cómo ha cambiado el país desde aquellos tiempos hasta hoy y de las similitudes que se pueden encontrar. “Todo ha cambiado, pero también hay paralelismos inquietantes”, escribe Sáenz-Francés.

En 1918 España vivía una importante crisis en los últimos coletazos de la Restauración, que “pudo haber sido el cimiento de una España sólidamente democrática” aparecieron los nacionalismos periféricos conseguirlos más allá de la ley, y los egoísmos palpables de líderes políticos de talento, que no veían más allá de sus propios intereses a corto plazo”. Y todo ello “con la mortalidad lacerante de una pandemia”, la de la gripe mal llamada española. «»En tres oleadas, la epidemia se cobraría la vida de cerca de un cuarto de millón de españoles. La única gran reducción de la población española en el siglo XX, junto con la Guerra Civil”, explica Sáenz-Francés.

Sáenz Francés compara la situación actual de bloqueo político con el de 1917, con un Parlamento polarizado y difícilmente gobernable, con egos políticos como los de entonces, y con una reducción de la calidad parlamentaria. Todo ello “quiebra el prestigio de las instituciones representativas y la identificación de los ciudadanos con ellas”. Con todo, el profesor aboga por una solución similar a la que se ensayó sin éxito en España en 1918: un gran gobierno de unidad nacional.